EDUCACIÓN

En Guainía se crea matemáticas

Las comunidades indígenas del país han desarrollado diversos conocimientos alrededor de las matemáticas. Estudiantes investigan sobre esta ciencia en las etnias del departamento.

2 de diciembre de 2015
Los indígenas se han valido de diferentes fórmulas a la hora de contar, medir, pesar o percibir el espacio.

Aunque actualmente el sistema más utilizado para simbolizar cantidades o magnitudes es el indoarábigo, diversas culturas han creado símbolos para representar los números y hacer operaciones con estos como los egipcios, los babilónicos o los mayas. Colombia no se queda atrás, los indígenas se han valido de diferentes fórmulas a la hora de contar, medir, pesar o percibir el espacio.

Así, diversos grupos en el país que quieren conocer sobre la herencia matemática de sus comunidades se han sumado a los estudiosos de la disciplina conocida como etnomatemáticas, término acuñado por el brasileño Ubiratan D’Ambrosio y que define a los conocimientos sobre esta ciencia en los distintos grupos culturales. Este es el caso de los alumnos de la institución La Primavera del departamento de Guainía, los cuales después de darse a la tarea de aprender diversos sistemas numéricos de la historia, hoy están explorando la escritura y simbología de los números de las etnias Kurripaco, Puinave, Sikuani y Piapoco en Inírida.

Según Ivon Andrea Rodríguez, profesora que lidera esta investigación, “la pérdida de nuestra identidad cultural es grave en la sociedad actual; en etnomatemáticas es mínimo el desarrollo de un currículo aterrizado a nuestro contexto”. Esta maestra se refiere específicamente al caso de la Guainía donde, aunque la mayoría de la población es indígena, las escuelas desconocen los asuntos identitarios y los aspectos socioculturales que influyen en la comunidad a la hora de enseñar.

Para los estudiantes que están en este proceso de investigación, los aprendizajes han sido múltiples pues, en primer lugar, han descubierto que la manera en la que en sus comunidades se utilizan las matemáticas está muy relacionada con sus creencias y su forma de ver el mundo, lo cual contrasta con otros sistemas matemáticos como el indoarábigo. “Aprendí un ejercicio que los números babilónicos son muy diferentes a los de Colombia y los de actualmente en el mundo”, dice el estudiante de séptimo grado Edwin Guzmán quien además, junto a sus compañeros de 11 y 15 años, identificó cómo en su etnia se expresaban los números por medio de la descripción de las partes del cuerpo, como lo hacían los mayas.

El grupo de investigación pudo concluir que en la etnia Puinave la escritura llega hasta el número 20, en Kurripako existe escritura de los números hasta el diez y en Sikuani hasta el cinco. Asimismo, aunque no existían símbolos que representaran dichos números, los niños los inventaron utilizando elementos representativos de su cultura y de su departamento y también consolidaron en cada lengua cómo se pronunciaban estos. Por ejemplo, el cinco para todas las etnias significa mano, pero en cada una se dice diferente, así en Puinave es Daptum, en Kurripalo es Pemanukapi y en Sikuani, Kaekobé Kae nojawa.

Por otro lado, los alumnos con el apoyo de su maestra y los indígenas de la región lograron diseñar diversas operaciones matemáticas como suma, resta o logaritmos con su propio sistema numérico, lo cual no sólo incentivó la creatividad de los niños sino que también afianzó los conocimientos de dichas operaciones en los menores y además, todo el proyecto ha recibido varias distinciones. En 2014 obtuvieron el primer lugar en la Feria departamental de ciencia y tecnología en la categoría de innovación pedagógica infantil y en noviembre de 2015 ganaron un cupo para participar en la Feria Nacional de Educación Artes Ciencia y Tecnología Argentina, gracias a Colciencias y el Programa Ondas.

El objetivo de la profesora Rodríguez, viendo el entusiasmo de sus alumnos por esta investigación que los acercaba a su identidad, es continuar descubriendo en cada clan cómo simbolizan los números y también introducir estos conocimientos en el Proyecto Educativo Institucional (PEI) para que no se pierdan los conocimientos ancestrales de las comunidades indígenas, no sólo de Guainía sino de otras partes del país.